viernes, 5 de octubre de 2007

Dios en nuestro Caminar

Muchas veces pensamos que en el camino de nuestra vida estamos solos y no tenemos en quién depositar nuestra confianza, angustia, anhelos y temores.
No importa dónde estemos, ni qué estemos haciendo, ni con quién; Dios siempre está allí al lado nuestro. Muchas veces llorando porque estamos haciendo daño a la vida que él nos regaló con tanto amor en la creación, otras veces, pensamos solamente en nosotros mismos y menospreciamos a nuestros/as hermanos/as. Allí Dios llora a nuestro lado, tomado de nuestra mano nos acompaña y nos incentiva a que busquemos el cambio del rumbo en nuestras vidas para lograr seguir SU camino.
Este Dios que se ha hecho ser humano por intermedio del nacimiento de Jesús, su hijo, que murió por nuestros pecados, resucitó venciendo a la muerte y nos promete la vida eterna, nos acompaña siempre con su Espíritu Santo estando al lado nuestro, consolándonos en momentos difíciles y permitiendo que lo encontremos aún en medio de situaciones que no podemos explicar y entender.
Este caminar puede transformarse en algo más placentero si empezamos a darnos cuenta que Dios jamás nos abandona, ni nos entrega a nuestra propia suerte. Está siempre, siempre a nuestro lado, tomando de nuestra mano, abrazándonos y poniéndose al tanto de que nos pasa.
Si estás en un momento de angustia, desesperación y dificultad pon tu mano en la mano de Nuestro Señor Jesús que Él te ayudará, te consolará y te invitará a que cambies tu vida.
Oración
Querido Dios padre/madre,
yo sé que estás siempre a mi lado y me acompañas
yo sé que muchas veces he cerrado mis oídos,
para no escuchar lo que me decías
por intermedio de otras personas que me
querían ver bien y que me han demostrado
el amor que solo Tú nos puedes dar.
Te pido que me guíes en este momento
de dificultad y de desolación para que
encuentre la serenidad y busque así
cambiar mi forma de vida para poder
acompañar el Cuerpo de Tú Hijo Jesucristo,
la Iglesia en la misión que nos has encargado.
Que Tú Espíritu Santo me guíe y me guarde
de todo temor y temblor. Que pueda confiar en Ti
deshaciéndome de la tiranía del egoísmo.
Gracias por estar acompañandome en este camino
que se hace lindo y placentero a Tú lado.
Amén.

No hay comentarios: